- El ministro de Derechos Sociales se ha reunido en Sevilla con los responsables de un proyecto piloto que ofrece un alojamiento estable y acompañamiento personalizado a personas sin hogar.
- El proyecto está impulsado por HOGAR SÍ y Provivienda, y ha sido financiado por el Ministerio de Derechos Sociales a través de fondos europeos, y por otras administraciones públicas como la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Sevilla.
Pablo Bustinduy, ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, ha viajado este viernes a Sevilla para reunirse con los responsables de «Derechos a la vivienda«, un proyecto piloto impulsado por las plataformas HOGAR SÍ y Provivienda que ha desarrollado un nuevo modelo de atención a personas sin hogar, ofreciéndoles un alojamiento estable y un acompañamiento personalizado. Se trata de un programa financiado por el Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030 a través de los fondos Next Generation del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia de la Unión Europea, y por otras once administraciones públicas, entre las que se encuentra la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento de Sevilla.
Durante el encuentro, Pablo Bustinduy ha podido conocer, de primera mano, los resultados positivos que ha tenido este proyecto piloto, que ha logrado atender a 524 personas que no tenían hogar antes de entrar en este programa. Se trata de personas que vivían en la calle o eran atendidas en recursos colectivos y que llevaban, de media, 7 años en esta situación. La actuación llevada a cabo por el proyecto, según han explicado sus responsables, ha sido ofrecer una vivienda a estas personas en entornos comunitarios, y darles un acompañamiento con el objetivo de que retomen su plan de vida. «Estos proyectos son fundamentales para demostrar que hay soluciones alternativas e innovadoras al problema de sinhogarismo, y además generan un conocimiento que posteriormente podremos aplicar en otros territorios del país«, ha señalado el ministro Bustinduy.
«Derechos a la vivienda» es un proyecto que, en palabras de sus responsables, pone la vivienda en el centro de la solución y que tiene dos líneas fundamentales de actuación: la desinstitucionalización de personas que llevan varios años sin hogar, y también la prevención de la institucionalización en personas que llevan menos de 1 año en situación de sinhogarismo. «El objetivo de este tipo de proyectos que estamos financiando es transformar el sistema tradicional de atención al sinhogarismo, para pasar de la atención que se da en albergues y en grandes centros a una atención de viviendas en comunidad«, ha explicado Pablo Bustinduy, poniendo en valor que este modelo es más eficiente y positivo para las personas que no tienen hogar. Y, además, ha destacado el ministro, es un modelo basado en evidencias. «Tenemos que desarrollar políticas públicas concretas que cuenten con una mayor implicación de todas las instituciones«, ha solicitado, durante un encuentro en el que también estaba presente José Luis García Martín, concejal de Derechos Sociales del Ayuntamiento de Sevilla.
Pablo Bustinduy ha defendido que con «una mayor voluntad política» es posible conseguir el fin del sinhogarismo en 2030, tal y como ha marcado la Unión Europea como reto comunitario. Para ello, ha asegurado el ministro, es prioritario que las administraciones públicas sigan impulsando proyectos y políticas sociales en todo el territorio, «y transitar hacia la desinstitucionalización«. En este sentido, Pablo Bustinduy ha resaltado la nueva estrategia de cuidados que presentó hace dos semanas en el Congreso de Ministros para su aprobación y que ofrece un «revolucionario modelo de cuidados en la comunidad» para el período 2024-2030 que va a ofrecer una atención a personas dependientes y también personas sin hogar, que esté basada en la autonomía de estas personas. «Responderemos a las necesidades de estas personas en un entorno cercano y de proximidad, que ofrezca servicios más personalizados«, ha dicho.