Clara formó parte de las 6.036 personas sin hogar menores de 29 años que fueron atendidas en centros de alojamiento colectivo en 2022 . Ahora, gracias al programa H4Y FUTURO, financiado por los fondos europeos Next Generation a través del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 y el Plan de Recuperación, y puesto en marcha por HOGAR SÍ y Provivienda, ha empezado a vivir en un piso compartido en Mallorca y cuenta con una oportunidad para recuperar su autonomía y generar su proyecto de vida, basado en sus necesidades, intereses y fortalezas.
“Incluso la relación con mi madre ha cambiado sólo por el hecho de estar en una vivienda”, explica Clara. “Ahora me puedo duchar, antes no me apetecía verla porque estaba en unas condiciones muy duras y no me sentía con ánimo para visitarla. Suena increíble pero cuando alguien está en la calle se ve impedido en cosas tan básicas como poder ir al baño cuando lo necesita”.
Jóvenes sin hogar, un problema estructural
El sinhogarismo juvenil es un problema creciente en todo el mundo, y España no es una excepción. Esta situación ha aumentado un 36% respecto a 2012, según datos publicados por el INE en su Encuesta sobre Personas Sin Hogar en 2022. La falta de viviendas asequibles y el desafío que supone la entrada al mercado laboral han llevado a un aumento en el número de jóvenes que no tienen acceso a un hogar estable. Además, la falta de recursos y apoyos adecuados para las personas jóvenes en situación de sinhogarismo puede aumentar aún más su exclusión social. Solo el 1,9% de este colectivo recibe el Ingreso Mínimo Vital o la Renta Mínima de Inserción.
Las personas jóvenes en esta situación se enfrentan a múltiples vulnerabilidades, incluyendo la falta de acceso a servicios básicos como la educación o la atención médica. Además, muchos y muchas jóvenes sin hogar experimentan una sensación de aislamiento y marginación, y paralelamente, tienen más probabilidades de sufrir problemas de salud mental. No tener un hogar es una grave violación de derechos humanos y afecta gravemente a otros derechos como la seguridad -el 42% ha sufrido delitos de odio.
Según el INE, más de la mitad de estas personas jóvenes se encuentra en esta situación al tener que empezar de cero al llegar de otro país. De hecho, la mayoría de las seis mil personas jóvenes que viven en la calle ha vivido procesos migratorios.
“Trabajamos especialmente con aquellas personas jóvenes que tienen una situación más complicada y vulnerable, y que han sido expulsadas o no son atendidas por el sistema de protección o por los sistemas existentes específicos para jóvenes sin referentes adultos”, explica Maite Luque, directora del proyecto H4Y FUTURO.
Una respuesta al sinhogarismo juvenil
H4Y FUTURO es un proyecto que ofrece una respuesta para las personas jóvenes de entre 18 y 25 años en situación de sinhogarismo. Basado en un enfoque de derechos, este programa pretende facilitar el acceso a un alojamiento estable y seguro y ofrece un acompañamiento social que permita generar procesos de autonomía. Atendiendo a las necesidades individuales y las propias del momento evolutivo en el que se encuentran los y las jóvenes.
HOGAR SÍ y Provivienda, trabajan desde un enfoque multiactor, conformado por la Alianza de ambas entidades, la colaboración de dos administraciones públicas, el Ayuntamiento de Madrid y el Consell de Mallorca, y cinco partners especializados. H4Y FUTURO ofrece una respuesta innovadora y flexible que se adapta a los diferentes perfiles de las personas jóvenes en situación de sinhogarismo y supone una mejora en su bienestar respecto a otros modelos tradicionales. El proyecto pretende testar la adecuación de la metodología Housing First for Youth, desarrollada con éxito en otros países como Escocia o Canadá, con las adaptaciones necesarias a nuestro contexto, con el objetivo de evitar la cronificación de estas situaciones y la adquisición de un nivel de autonomía suficiente para mantener una vida independiente del sistema de atención al sinhogarismo.
Una metodología para empoderar a la juventud
La metodología Housing First for Youth se basa en la idea de que el acceso a una vivienda estable es un derecho fundamental, por lo que se proporciona de forma rápida, sin condiciones previas, para evitar que la situación se cronifique. Además, la metodología también incluye apoyos personalizados, sin límites de tiempo, atendiendo al momento vital que atraviesan las personas jóvenes y a las casuísticas específicas del sinhogarismo juvenil.
Por ello, se acompaña a los y las jóvenes hacía un plan de autonomía que refleje sus sueños, metas, inquietudes y fortalezas, atendiendo y facilitando los apoyos concretos que puedan necesitar. Uno de los aspectos innovadores de esta metodología es el acompañamiento desde un enfoque de trauma, ya que, en ocasiones, estos y estas jóvenes han vivido sucesos vitales traumáticos en su infancia, experiencias de abandono o de negligencia, duelo migratorio, ruptura y ausencia de referentes adultos y carencia de experiencias personales previas como consecuencia de su corta edad.
Este proyecto innovador favorece un tránsito seguro hacia la edad adulta y la vida autónoma, fomentando el empoderamiento, la participación y el protagonismo juvenil y facilitando un desarrollo positivo de la juventud.
Clara Fuentes, técnica de incidencia y comunicación de H4Y FUTURO.
* Fuente de los datos: Instituto Nacional de Estadística (2022). Encuesta sobre Personas Sin Hogar.